Cinco años después de los sucesos en el pueblo de Hope, John Rambo está encarcelado por sus antiguos crímenes, pero recibe la visita del coronel Trautman, quien le hace la propuesta de la misión optativa de regresar a Vietnam, a comprobar si aún quedan prisioneros de guerra. Si la misión resulta bien, el presidente le concedería el perdón, y sería libre. Rambo acepta. Está bajo las órdenes de un falso teniente, Marshall Murdock, al que en el fondo solo le interesan el dinero y el poder de su nación, y al que le da igual perder a unos cuantos hombres, por muy inocentes que sean, si sigue controlando las cosas como él quiere. Murdock le encomienda a Rambo que solo saque fotos, y que no ataque al enemigo.